El 10 de octubre trajo consigo el inicio de las nuevas administraciones públicas municipales en el estado de Guanajuato; en nuestra región noreste, empezaron álgidas las confrontas, San José de Iturbide, está vez fue quien resonó a nivel estatal.
En estos días, he tenido la fortuna de platicar con muchas personas inmersas en el mundo de la política y del derecho, con quienes hemos platicado respecto de lo que acontece en San Jo.
Primeramente, el tema por sí solo, resulta interesante; hasta para aquellos que somos políticos de banqueta. Esto debido a la postura que han tomado las propias dirigencias estatales de los partidos políticos involucrados a través de la representatividad de sus regidores y del propio alcalde Manuel Montes.
No cabe duda que el que sabe, sabe. Edgar Manuel Montes de la Vega, Doctor en Derecho, en sus declaraciones, hace uso de la experiencia que le ha dado su ejercicio profesional, aunado a la reconocida trayectoria política que existe en su familia, que quieran o no, también se pega.
Sin embargo, precisamente en el ámbito político es donde se debe privilegiar el dialogo, la apertura, los consensos, cuando estos se pierden no se llega a nada bueno y, lejos de que se privilegie el bienestar social, se deja de manifiesto los intereses personales, de colores y partidos.
No vayamos tan lejos, la última vez que, en la región se vivió una situación de conflictos internos en el Ayuntamiento, ocurrió en Doctor Mora, por allá del 2014, cuando el entonces alcalde, de extracción panista, Emilio Zarazúa Reyes, perdió totalmente el control del cabildo. El desenlace fue la intervención de la Secretaria de Gobierno del Estado, la licencia de Zarazúa Reyes y una ruptura del panismo local. En aquel entonces, la sociedad agradeció el hecho.
La Ley para el Gobierno y la Administración de los Municipios del Estado de Guanajuato, precisa las causales de revocación del mandato:
Artículo 66. Son causas de revocación del mandato por el Congreso del Estado:
- Las violaciones graves y reiteradas a los derechos humanos reconocidos en la Constitución General, en los Tratados Internacionales en materia de Derechos Humanos ratificados por el Estado mexicano, a la Constitución del Estado y a las leyes que de ellas emanen;
- Dejar de asistir sin causa justificada a tres sesiones ordinarias del Ayuntamiento o Concejo Municipal en forma continua o dejar de asistir sin causa justificada hasta cinco sesiones durante un periodo de seis meses.
Las causas y las formas de justificación deberán establecerse en el reglamento respectivo;
- Realizar desvío de los recursos derivados de la Administración Pública Federal, Estatal o Municipal;
- Violar en forma grave y reiterada la Ley de Ingresos Municipal y el presupuesto de egresos aprobado y la normatividad aplicable, que afecte los caudales públicos; y
- Vulnerar gravemente las instituciones democráticas y la forma de gobierno republicano, representativo, federal, democrático y laico.
Será interesante ver en cuál de estas causales, el Presidente Manuel Montes, encuadra el desacato que indilga a los Regidores.
El problema va más allá. Los conflictos que tiene el Ayuntamiento Iturbidense pronto comenzarán a permear en los diferentes ámbitos de la vida social. Esto debido a que, aun no se ha llevado a cabo la entrega recepción, conforme lo establece la Ley, las Comisiones deben comenzar a trabajar respecto del seguimiento de la entrega misma.
Aunado a lo anterior, se encuentra el seguimiento a la iniciativa de la Ley de Ingresos para el ejercicio 2025, la elección de los delegados municipales y demás actividades que la vida cotidiana les exigirá su pronta atención.
¿Vale tanto la pena seguir peleando? La decisión ahora corresponderá al Congreso del Estado, lo que habrá de derivar del análisis que se haga de las condiciones. ¿La Secretaría de Gobierno cómo intervendrá?
La mayor falta de respeto no la hacen entre sus correligionarios, tampoco es entre los mismos integrantes del cabildo, la mayor falta de respeto la hacen a los iturbidenses que confiaron ellos con la finalidad de que a San José de Iturbide le vaya bien.